Llega a la Argentina la séptima generación de uno de los modelos más aclamados por los usuarios de medianos. Se produce en México y se ofrece en dos versiones de motor naftero.
Se hizo esperar pero llegó. El hatchbach de VW se presenta en el mercado local luego de un tiempo de indecisiones. La producción mexicana (no hay aranceles de intercambio que atenten contra su importación) permite el lanzamiento local. Se trata de la séptima generación, una gama que en breve se completará con las opciones Variant (rural) y GTI (deportiva). Inicialmente se ofrece en dos variantes de motor naftero de cuatro cilindros, un 1.6 con tapa de 16 válvulas que entrega 110 CV conectado con una caja manual de cinco velocidades, y un 1.4 TSI turbo de 140 CV, en este caso con transmisión manual de sexta automática de doble embrague y siete relaciones (DSG). Todas las opciones están bien equipadas ya que, en materia de seguridad ofrecen de serie, control de estabilidad ESP. Las versiones mejor provistas suman, entre otros, siete airbags, asistencia al arranque en pendiente, dirección eléctrica, anclajes Isofix y sensores de estacionamiento delanteros y traseros. Además, aparecen en la lista, sistema multimedia (AM/FM/CD/MP3/SD/MDI iPod/Bluetooth) con pantalla táctil de 5,8″.