Unos 2,3 millones de turistas y 2,1 millones de excursionistas recorrieron la Argentina durante este fin de semana extra largo. Con un nivel de ocupación que promedió el 90%, el feriado de junio ingresó al calendario turístico como uno de los más

importantes del año. La gente viajó por diferentes destinos del país y festejó el Día del Padre, más allá de que el gasto diario se elevó a $6.500.

De acuerdo con un informe publicado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), el feriado que combinó la conmemoración del paso a la inmortalidad del General Martín de Güemes y el Día de la Bandera quedó cerca de igualar las cifras de Semana Santa. Fueron 4,4 millones de viajantes que recorrieron el circuito turístico argentino y, en total, se calcula que desembolsaron 55.070 millones de pesos.

El relevamiento difundido por la entidad empresarial puntualizó que, a precios constantes, el gasto diario per cápita tuvo un incremento del 35,4%. Los 2.324.680 turistas desembolsaron $50.048,5 millones el fin de semana, incluyendo hospedaje, transporte, comida y otros gastos. La estadía media fue de 3,3 días, similar a Semana Santa, y el gasto diario per cápita promedió $6.524.

A los turistas se agregaron 2.092.212 excursionistas que, a diferencia de los primeros, solamente "se trasladaron por la jornada a localidades cercanas en busca de ocio, recreación, deportes, recitales, festejos patrios y encuentros familiares", en una fecha que coincidió con el Día del Padre.

"Hubo una nutrida agenda de eventos, destacándose el Foro Nacional de Turismo, con 1.500 participantes del país en Termas de Río Hondo o el Desfile Gaucho en Salta que convocó a 7.000 gauchos de todos los rincones de la Argentina", destacó el informe. Al respecto, indicó que "las ciudades, junto con sus provincias, cada vez invierten más recursos en generar identidad mediante estos eventos, que tienen alto impacto económico y a la vez le ofrecen opciones recreativas a los habitantes que no viajan".

LA COMPARACIÓN CON LA PREPANDEMIA

El informe de CAME destacó el aumento en la cantidad de gente desplazada por el día adicional, que logró "convocar mucha más gente a viajar". En comparación con junio de 2019, cuando el fin de semana largo solo tuvo 3 días, se movilizaron 148,1% más de turistas y 94,2% más de excursionistas. A su vez, la estadía promedio aumentó 32%, y el gasto diario subió 386,9% a valores corrientes y 35,4% en términos reales.

Los excursionistas abonaron, en promedio, $ 2.400 cada uno, sumando un gasto total de $ 5.021,3 millones. A precios constantes, resultó 21,3% mayor al mismo fin de semana previo a la pandemia.

"Frente a 2019, ese gasto total (a precios constantes) que realizaron los turistas subió 343,4%, que se explica por dos motivos: el día adicional convocó a mucha más gente a viajar; y porque el turismo cada año gana participación en la canasta de consumo de los hogares, con más gente que viaja y más dinero destinado a lograr una buena estadía", concluyó el informe.