Escenario propicio para disfrutar de la naturaleza y el deporte, la capital entrerriana prepara un verano especial. Balnearios, aventura, diversión y cultura para todos los gustos.

Es una de las ciudades más importantes del país y esa condición, también la hace valer en el turismo. La capital entrerriana, ofrece para el turista un cúmulo de atracciones, que tienen al caudaloso río que le da nombre como protagonista. Son numerosas las iniciativas que despliega hoy Paraná, para promocionar turísticamente la ciudad y potenciar su Borde Costero.

En el marco de la época estival, las barrancas costeras, se constituyen en privilegiada platea para observar las instancias decisivas, de la maratón acuática más larga del mundo, servirán como lugar de enclave para el escenario de la Fiesta Nacional del Mate (la propuesta se enriquece con peñas, conferencias, presencia de los sabores de las colectividades, artesanos, y el celebrado Concurso Nacional de Cebadores de Mate).y, a sus pies, las playas de la capital entrerriana, exhibirán más espacio y más arenas.

El lanzamiento de las playas de Paraná, incluye los balnearios del Thompson, Municipal y de Bajada Grande, aunque este año, habrá una importante novedad ya que será inaugurado un sector de playa ecológica, junto al islote municipal Curupí, un sitio pleno de naturaleza, en medio del río.

Torneos y exhibición de wakeboard y karting en la Costanera, también se suman al verano de Paraná, que es punto de llegada de la maratón Hernandarias-Paraná de casi 90 kilómetros de recorrido, y por ello, la más larga del mundo. Ocurre en febrero, con la participación de decenas de nadadores internacionales.

La ciudad

Paraná, fue poblada por inmigrantes ruso-alemanes a fines del siglo XIX y a ellos, le debe su cultura y gastronomía. Otro hecho clave en la propuesta de esta ciudad, es la vigencia de “Dos ciudades, Un destino”, propuesta conjunta con Santa Fe, a través de la cual, ambas ciudades han unificado su propuesta a nivel nacional, estableciendo una combinación de atractivos y recursos turísticos, aprovechando la proximidad entre ambas capitales (apenas 27 kilómetros) a través del Túnel Subfluvial.

Como destino tradicional, Paraná ha sabido imponerse también, en períodos claves para el turismo nacional, como Semana Santa y Vacaciones de Julio, con altos niveles de atractivos y ocupación. Los fines de semana largos y los eventos nacionales e internacionales que eligen a Paraná, son otros de los factores de la permanente actividad turística, de la capital entrerriana.

Además, la ubicación de Paraná en la geografía Argentina es estratégica, más allá de sus bellezas y productos turísticos: está a 180 kilómetros de Rosario, 380 kilómetros de Córdoba y 490 de Capital Federal, por citar algunos centros importantes del país, con una conexión vial rápida y de primer nivel.